¿Qué son los autocuidados en psicología?

La promoción del autocuidado está en boca de todos. Digamos que está de moda cuidarse. #selfcare, #healthylifestyle, #wellness, son algunos de los hashtags que encontramos en redes y nos suscitan la idea de “oye, debo cuidarme más”. Genial, me gusta que quieras cuidarte, pero disculpa, ¿debes cuidarte? Ese “debo” chirría en mi cabeza como una bisagra oxidada. Empezar a cuidarse es empezar a hablarnos con amabilidad, es entrenar la comprensión y practicar la aceptación. Venga, vamos a ver cómo puedes empezar a ejercitar tu autocuidado.

Explorando el autocuidado desde la perspectiva de la psicología

Nos preocupamos del cuidado físico, pero ¿le prestamos atención al cuidado mental? ¿A nuestro bienestar emocional? El autocuidado es el cuidado y cultivo de nosotras mismas en nuestra totalidad. Supone fortalecer la salud física, mental, emocional y social. Es la habilidad de sabernos escuchar y poder decidir qué queremos o qué necesitamos según el momento. Es la fortaleza de no vernos arrastradas por toda la información que pasa ante nosotras como un torrente y nos deja la cabeza “patas arriba”. Anota el mantra: “Me quiero y me cuido. Yo elijo cómo estar bien y sana”.

Empezar a cuidarse una misma es poder parar, respirar y sentir qué nos pide realmente nuestro interior. Hacer Pilates, ir a clases de pintura, salir de fiesta, leer tranquila, meditar, hacer una tarta, ir al cine, dormir hasta tarde, comer más fruta, aprender un idioma. Las opciones saludables son infinitivas, siempre y cuando a ti te motiven, te hagan sentir bien y sean de tu propia elección. Todo esto ayudará a que crezca tu autoestima y confianza y dará la oportunidad de que conozcas tus fortalezas y debilidades. 

Es recomendable entrenar el autocuidado en todas sus áreas. Ten en cuenta que lo importante NO es centrarse en un solo aspecto, sino en crear un ambiente global saludable que te permita disfrutar al completo de ti misma. Y esto es como todo, cuanto más saludable sea el ambiente que te rodea, más opciones tendrás para afinar en tus elecciones, establecer tus propios hábitos y conseguir el bienestar que te mereces.

A continuación, encontrarás algunos consejos para ayudarte en el proceso de autocuidado:

  • Anímate a continuar este recorrido junto a un profesional que te ayude a gestionar las emociones y pensamientos de la mejor manera posible y llegues a encontrar tu bienestar interior.
  • Practica la autorreflexión diariamente desde una mirada compasiva.
  • Reconoce tus emociones y sentimientos sin juzgarte. No hay peor juez que uno o una misma.
  • Haz de la autocompasión una herramienta vital. ¿Cómo? Háblate con amabilidad y comprensión, no te exijas tanto. No pasa nada por no dar hoy el 100% o sentirte mal. Mañana será otro día.
  • Practica la gratitud llevando un registro de las cosas bonitas por las que estás agradecida.
  • Piensa en metas realistas que puedas conseguir a través de objetivos más pequeños.
  • Celebra tus logros, eso te motivará para continuar.
  • Establece y cuida una red de apoyo saludable con la que puedas compartir tus experiencias y sentimientos sin sentirte juzgada: Será liberador.
  • Plantéate una rutina saludable en todos los niveles: alimentación, descanso, tiempo libre, ocio, etc. Recuerda: “Mens sana in corpore sano”.

Y como broche final, permíteme que te recomiende algunos libros para que puedas seguir indagando:

  • “Lo bueno de tener un mal día: Cómo cuidar de nuestras emociones para estar mejor” de Anabel González.
  • “Hábitos atómicos: Cambios pequeños, resultados extraordinarios” de James Clear.
  • “Vivir en modo Kaizen: Siente el poder de hacer ahora aquello que depende de ti” de María Martínez.
  • “Ikigai: Los secretos de Japón para una vida larga y feliz” de Francesc Miralles.

Me despido, no sin antes darte las gracias por leerme, desearte ánimo y tenacidad en el camino del autocuidado y, por último, decirte que si sientes que la vida te desborda y todo está fuera de control, siempre puedes contactar con nosotras.

Un abrazo.

Si necesitas ayuda para aprender a mejorar tu autocuidado, y buscas psicóloga en Sevilla, no dudes en contactar conmigo.